Cuando la lana se encoge, generalmente es debido a la exposición al calor o al agua caliente, lo que provoca que las fibras se contraigan. Aquí tienes algunos métodos para intentar solucionar el encogimiento de la lana:
- Remojo en agua y acondicionador:
- Llena un recipiente grande con agua fría.
- Agrega un acondicionador para el cabello suave (sin enjuague) al agua y mezcla bien (en algunos sitios he leído que también se puede añadir un vaso de vinagre, puede ser limpieza, vino o manzana).
- Sumerge suavemente la prenda de lana encogida en esta solución y déjala en remojo durante al menos 30 minutos.
- Con cuidado, estira suavemente la prenda mientras está en el agua para ayudar a relajar las fibras.
- Después del remojo, retira la prenda y extiéndela sobre una toalla seca. Estira cuidadosamente la prenda a su tamaño original.
- Deja que la prenda se seque completamente en posición horizontal.
- Vaporización y estirado:
- Coloca la prenda de lana encogida sobre una superficie plana y cubre con un paño húmedo.
- Usa una plancha a vapor a baja temperatura y pasa suavemente sobre el paño húmedo.
- El vapor ayudará a relajar las fibras de la lana. Mientras estás pasando la plancha, estira suavemente la prenda para volver a su forma original.
- Deja que la prenda se seque naturalmente mientras la sigues estirando ocasionalmente.
- Lavado con acondicionador y estirado:
- Llena un lavabo o recipiente con agua fría y agrega acondicionador para el cabello sin enjuague.
- Sumerge la prenda de lana encogida en la mezcla y déjala en remojo durante al menos 30 minutos.
- Después del remojo, saca la prenda y extiéndela suavemente sobre una superficie plana. Estira la prenda a su tamaño original con cuidado.
- Deja que la prenda se seque naturalmente en posición horizontal.
Es importante tener en cuenta que el éxito de estos métodos puede variar según la gravedad del encogimiento y el tipo de lana. Siempre realiza una prueba en una pequeña área oculta de la prenda antes de aplicar el método completo.