Un poco de historia…

Texto del libro Historia de España contada con sencillez (José María Pemán).

Don Juan II

El sucesor de Don Alfonso V fue, como hemos dicho, Don Juan; segundo de este nombre en Aragón y último rey de dicho reino, que, en el rey siguiente, va ya a unirse para siempre con Castilla.

Don Juan II tuvo que luchar con un primo suyo que en realidad tenía mejor derecho que él al trono y que se llamaba Don Carlos, príncipe de Viana. El pretendiente buscó apoyo en los catalanes y estos se lo dieron, entablándose una guerra civil o interior. Logró en esta Don Carlos algunas victorias y al fin Don Juan II hizo con él un arreglo, según el cual Don Carlos mandaría en Cataluña, pero solo como gobernador y en nombre del rey Don Juan.

A los pocos meses de este acuerdo, Don Carlos murió repentinamente. Lo extraño de esta muerte, en la flor de su vida, hizo suponer a muchos que había sido envenenado; y entonces los catalanes, sus amigos, indignados, rompieron toda relación con Don Juan II y declararon a Cataluña independiente.

Pero no independiente de España

Es la primera vez en la Historia que suena en Cataluña el grito de independencia y separación. Pero no se crea que ese grito de Cataluña tiene nada que ver con los gritos separatistas y antiespañoles que en esta última época se oyeron allí, por desgracia.

Cataluña quiso entonces, por esta cuestión puramente interna, separarse del rey Don Juan II; pero lejos de querer separarse de España, lo que hizo inmediatamente fue ofrecer su corona al rey de Castilla, Enrique IV, que no la aceptó, y luego al rey de Portugal, Don Pedro, que murió poco después. Es decir, que al querer separarse de Aragón, por una cuestión política entre ellos, Cataluña quería meterse más adentro de España, unirse a los otros reinos peninsulares más interiores. Al ofrecer su corona al rey de Castilla, se anticipaba a la unión que luego lograron los Reyes Católicos. Al ofrecerla al rey de Portugal, se anticipaba a la unión que, luego, como veremos, logró Felipe II. ¿Era esto ser separatista? ¿Era esto sentirse antiespañoles?

Y para esos separatistas que, en algún momento, sintieron tanta admiración por Francia y hasta hablaron de entregarle Cataluña, antes de seguir unidos a España, convendrá recordar que en aquella guerra interior fue Don Juan II de Aragón el que buscó la alianza de los franceses contra los catalanes. Y cuando, como aliados del aragonés, las tropas francesas entraron por los Pirineos, los catalanes contestaron a sus mensajes para que se rindieran, que «primero se darían al turco que al rey de Francia».