Cervantes (Rinconete y Cortadillo) y una vida coherente…
Este es el problema de muchos: ser dos (o tres) personas en una, dependiendo del contexto en que se encuentren. Los dobles estándares, la incoherencia, la falta de unidad de vida. Son estos los que se fabrican un dios a su medida, una religión light o llevadera que se acomode a su actuación (no a su forma de pensar); aquellos que actúan de una manera delante del jefe (o el profe; o los padres) y de otra opuesta, si ese día éste se tiene que ausentar. En el fondo hay una falta de interés en buscar la Verdad. Que la verdad existe, es evidente: cuántas veces nos enfadamos si nos creemos estafados (por que simplemente nos mienten…). Creemos en la verdad. Pero de ahí a buscarla en todo, con cada consecuencia…
El agua bendita no hace bueno lo malo
No se puede ofrecer a Dios lo que, en lugar de agradarle, le ofende. Lo malo no deja de ser malo por más agua bendita que se le eche encima.
El verdadero ofrecimiento de obras debe extenderse a todas las acciones del día: un sincero empeño durante la jornada por mejorar en lo que hemos ofrecido. Sigue con una estupenda cita ad-hoc de Cervantes…
Pedro Rincón pregunta a Diego Cortado:
-¿Es vuesa merced, por ventura, ladrón?
-Si- respondió él-, para servir a Dios y a las buenas gentes, aunque no de los muy cursados; que todavía estoy en el año de noviciado.
A lo cual respondió Rincón:
– Cosa nueva es para mí que haya ladrones en el mundo para servir a Dios y a las buenas gentes.
A lo cual respondió el mozo:
– Señor, yo no me meto en tologías. Lo que sé es que cada uno en su oficio puede alabar a Dios, y más con la orden que tiene dada Monipodio a todos sus ahijados.
– Sin duda – dijo Rincón-, debe ser buena y santa, pues hace que los ladrones sirvan a Dios.
– Es tan santa y buena -replicó el mozo-, que no sé yo si podrá mejorar en nuestro arte. El tiene ordenado que de lo que hurtáremos demos alguna cosa o limosna para el aceite de la lámpara de una imagen devota que está en esta ciudad; y en verdad que hemos visto grandes cosas por esta obra buena…
Fragmento, extracto de Rinconete y Cortadillo, comedia de Miguel de Cervantes ofrecido Agustín Filgueiras