Contaba un clérigo la anécdota de los trescientos, como consejo para vivir la virtud cristiana de la castidad, que se podría poner hoy como:
1. Vivir a trescientos kilómetros de la novia o novio,
2. mirar internet junto con trescientas personas y
3. ponerse trescientos botones en el pantalón, para desanimarse desabrochando, si llega un momento difícil. De todas maneras lo más práctico es siempre QUITAR LA OCASIÓN. Esta es la enseñanza de la siguiente anécdota, de cuando Clinton (conocido por su falta de autocontrol) era presidente de los EEUU. Continúa…
COSEN LA BRAGUETA DE LA FIGURA DE CERA DE CLINTON EXHIBIDA EN SIDNEY PARA EVITAR FOTOS COMPROMETIDAS.
La frecuencia con la que los visitantes del Museo de Cera de Sidney (Australia) bajaban la cremallera de la bragueta de la figura del presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, ha obligado a cosérsela para evitar fotos comprometedoras y situaciones incómodas.
La bragueta de la figura de cera del hombre más poderoso del planeta se ha convertido en la principal atracción de la exhibición del Museo de Cera de Madame Tussaud, según informa el diario The Sidney Moming Herald.
Ante la obsesión de los visitantes, el trabajo de los guardias del museo —obligados a subir constantemente la cremallera de la figura presidencial— y las situaciones embarazosas, la directora de la exhibición, Vicky Brown, optó por coser el pantalón del doble de Clinton.
(La Nueva España)