Como anécdota, se recuerda el episodio en el que, durante la Supercopa de 1995, derribó al jugador del Flamengo Edmundo en el Maracaná de un puñetazo, respondiendo a una violenta provocación de este último.
A raíz de este hecho y por sus logros en el club de Liniers, un grupo de hinchas que se autodenomina «Los 100 barrios», realizó un mural en las cercanías del Estadio José Amalfitani y una bandera en homenaje a Zandoná y a la trompada.