Sólo los humildes son capaces de hacer cosas grandes.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
Entra en tu corazón y barre.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
Qué pronto nos olvidamos de las atenciones que Dios tiene con nosotros. ¡Qué desmemoriados somos con sus favores! Los gritos de júbilo que proferimos por un milagro un día de sol, los arrinconamos al día siguiente con las primeras nubes.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
Ignoramos lo que puede resultar para nosotros, para los que nos rodean, para el mismo mundo, para el mismo Dios, de un día en el que hayamos puesto todo nuestro talento – cabeza y corazón- en hacer bien, con fervor, lo que Dios nos pide.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
Se hace y se rehace la vida cuantas veces sea preciso. Todo menos pararse.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
Un mismo dolor, a unos destroza a otros los santifica.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
Todos los hombres estamos unidos con parentesco espiritual. Las deslealtades de unos perjudican a muchos. La santidad de otros benefician a todos.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
Vivió mucho en poco tiempo.
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres
¿Y si yo te dijera que todos los días nos llega una alegría envuelta en un pequeño contratiempo?
Jesús Urteaga; Cartas a los hombres