“Tiene Cristo espíritu vivificador, espíritu que da vida, que resucita a los que deseamos vida. Vamos a Cristo, busquemos a Cristo, que el tiene resuello de vida. Por malo que estés, por perdido, por desconcertado que seas, si a Él vas, si a Él buscas, te hará bueno, te ganará y enderezará y sanará”.
(S. Juan de Ávila, “Sermones”, en el domingo de Pentecostés)