VIRUTAS DE MADERA PRECIOSA:
«No me digas lo mucho que trabajas. Háblame de lo mucho que haces». (Jarnes Ling)
Fe de campesina bretona
El nombre científico de Pasteur no necesita presentación. Nacido en 1822 y fallecido en 1895, el ilustre profesor de Química de París descubrió el origen de muchas enfermedades, que no es otro que la existencia de bacilos, y a él se debe el haber aparecido un remedio contra la rabia.
Este hombre no solía disimular su fe religiosa.
En cierta ocasión le preguntaron cómo era posible ser tan fervoroso católico, cuando tantos otros sabios se apartaban de la religión.
Pasteur dio la siguiente respuesta: «Con lo que he estudiado, he adquirido la fe de un campesino bretón» (conviene aclarar que los bretones son reputados como hombres muy piadosos).
Y añadía: «Si hubiese estudiado aún más, no dudo que mi fe hubiera sido la de una campesina bretona» (en Bretaña, las mujeres se llevaban la palma en cuanto a piedad).
Cfr. Spirago, Catecismo en ejemplos