Querido/a [Nombre de Tu Hijo],
Hoy, mientras el tiempo marca el primer aniversario de tu partida, mi corazón se llena de una mezcla de dolor y amor. Aunque ya no estás físicamente entre nosotros, tu presencia se siente en cada rincón de nuestras vidas, especialmente en este día tan significativo.
Recordar tu sonrisa, tus risas y todos los momentos compartidos es como revivir fragmentos preciosos de nuestro pasado juntos. El vacío que dejaste es irremplazable, pero tu legado perdura en la luz que trajiste a nuestras vidas y en la huella imborrable que dejaste en nuestros corazones.
Hoy, en este aniversario sombrío, quiero honrar tu memoria con palabras de amor y gratitud. Aunque el dolor de tu ausencia no disminuye, celebro la dicha de haberte tenido como mi hijo/a. Cada día contigo fue un regalo, y hoy, en tu aniversario, reflexiono sobre la bendición que fuiste para nosotros.
Imagino que estás en un lugar donde el tiempo es eterno, donde la paz y la serenidad te rodean. Que encuentres consuelo en los brazos de la eternidad, y que sepas que tu memoria vive en cada latido de nuestros corazones.
Con amor eterno y lágrimas en los ojos,
[Tu Nombre]
