La historia de Victor Coella, un hombre de 96 años con un hijo de 63 años…
Su caso se conoció durante una comparecencia real ante el juez Frank Caprio, quien se conmovió ante su relato. Él es conocido en Estados Unidos por ser considerado «sensible y humano».
El anciano explicó que sobrepasó el límite de velocidad en una zona escolar, todo porque debía ir al médico con su hijo de 63, quien es discapacitado y con cáncer.
Aquello conmovió al magistrado, quien no tuvo más que desestimar el caso. El momento fue registrado y se ha vuelto viral por la hermosa historia de amor y lucha.
«Usted está acusado de conducir demasiado rápido por una zona escolar“, le dijo el juez al hombre.
A lo que Coella contestó: “No conduzco rápido, señor juez. Tengo 96 años, voy despacio y solo conduzco cuando es necesario».
Y agregó: «Iba a realizar un examen de sangre para mi hijo, él es discapacitado», detallando que su hijo tiene 63 años y “tengo que llevarlo cada dos semanas porque tiene cáncer”.
Al escuchar la explicación el juez Caprio le dijo: «Usted es una buena persona. Tiene 90 años y se preocupa por su familia. ¿Ve a ese joven de ahí? Es mi hijo. Él me está mirando como diciendo: ‘Papá, cuando tú tengas 90 años, tú vas a conducir por mí’. Usted está siendo un mal ejemplo para mi hijo».
Finalmente Caprio decidió desestimar su caso concluyendo que «está poniendo mucha presión sobre mí. Le deseo lo mejor a usted y le deseo buena salud a su hijo. Su caso queda desestimado».